Problemas habituales en el desarrollo de los senos femeninos

Es habitual, y totalmente normal, que las mujeres tengan un seno ligeramente diferente al otro. Puede que una mama sea más grande que la otra o que un pecho tenga una forma o presente una posición ligeramente distinta. Por lo general, la diferencia no se nota externamente y no supone una amenaza médica, pero, en ciertas ocasiones, el desarrollo desigual de los senos puede causar problemas físicos significativos, además de problemas psicológicos derivados.

La forma, el tamaño, la simetría y la proporción de los pechos juegan un papel fundamental para el equilibrio físico y emocional de la mujer.

¿Cómo es el desarrollo mamario normal?

El desarrollo del seno comienza antes del nacimiento, cuando se formanlos pezones y empiezan a desarrollarse los conductos lácteos. Durante la pubertad el pecho comienza a elevarse y agrandarse, y la areola se oscurece. A lo largo de la vida premenopáusica los senos experimentan cambios durante el ciclo menstrual, lo que puede provocar una hipersensibilidad e inflamación que desaparece poco después de la menstruación. La verdadera maduración y el desarrollo completo del seno no seproduce hasta que la mujer se queda embarazada y sus senos comienzan a producir leche.

Tras la menopausia, la falta de estrógeno hace que los tejidos conectivos de los senos pierdan elasticidad, causando que los pechos pierdan su forma.

Problemas más comunes

Los problemas más comunes relacionados con el desarrollo de los senos hacen referencia al desarrollo de pechos demasiado grandes o demasiado pequeños, a la existencia de pechos con diferentes tamaños, formas… estos son algunos ejemplos:

Desarrollo excesivo del tejido mamario

La hipertrofia mamaria, es decir, el desarrollo excesivo del tejido mamario, provoca que los senos sean demasiado grandes. Las mujeres afectadas por este problema pueden padecer dolor de espalda, cuello y hombros y, con frecuencia, enrojecimiento debajo de la piel de los senos debido a la fricción y al sudor. Existen dos tipos específicos de hipertrofia mamaria:

  • La hipertrofia gestacional: que es la hipertrofia de los senos que ocurre durante el embarazo.
  • La macromastia juvenil o la gigantomastia juvenil: afecta a niñas durante la pubertad.

El tratamiento de la hipertrofia mamaria puede implicar tratamientos hormonales como el tamoxifeno, la progesterona o la testosterona. En casos severos, se recomienda la cirugía de reducción de senos para reducir la tensión en la espalda y los hombros.

Subdesarrollo mamario

Hay que distinguir entre la hipoplasia mamaria, que se caracteriza por un desarrollo del pecho insuficiente debido, principalmente, a la falta o poca cantidad de estrógeno durante la pubertad y el embarazo (hipoplasia involutiva), y la aplasia mamaria, que hace referencia a la ausencia de pecho causada porque la glándula mamaria cesa su crecimiento durante la etapa de crecimiento. En ambos casos y tras finalizar el desarrollo completo de las mamas, el aumento de pecho es la cirugía indicada.

Desarrollo asimétrico de los senos

La asimetría mamaria se produce cuando un seno es más pequeño o más grande que el otro. Casi ninguna mujer posee pechos exactamente iguales, la mayoría de los senos son asimétricos hasta cierto punto. Los senos asimétricos se hacen visibles durante la pubertad, a medida que el tejido mamario se desarrolla. Con el paso de los años la asimetría puede volverse más evidente. Se recomienda que la cirugía para corregir este problema estético se realice cuando los senos están completamente desarrollados. Existen diferentes opciones quirúrgicas: aumento de pecho, reducción de senos, elevación mamaria, tratamientos de transferencia de grasa…

Teniendo en cuenta la situación de cada paciente se tomará la decisión de aumentar el pecho más pequeño o reducir el pecho más grande; además de corregir aspectos como la posición y el tamaño del pezón… La mayoría de las pacientes prefiere aumentar el tamaño del pecho más pequeño, pero suele conseguirse una mejor simetría reduciendo el tamaño del pecho más grande. Es fundamental que la paciente escuche los consejos del cirujano para conseguir el mejor resultado.

Desarrollo de senos tuberosos

La mama tubular o tuberosa se produce por un insuficiente desarrollo del tejido mamario durante la pubertad, que se traduce en senos asimétricos y alargados. No se trata únicamente de pechos pequeños, son pechos que no están completamente desarrollados y que presentan forma de tubo alargado. La base de un pecho tuberoso es muy estrecha y está envuelta con gran cantidad de piel.

Las técnicas quirúrgicas necesarias para corregir los pechos tuberosos dependen del grado de hipoplasia o falta de grado de desarrollo del tejido mamario, y van desde el uso de técnicas para la expansión del tejido, la colocación de implantes, el aumento de las mama y otras. Es un proceso bastante creativo mediante el cual el cirujano puede mejorar de una forma muy sustancial la forma, el tamaño y la simetría de los pechos.

Desarrollo de mamas y pezones invertidos

El pezón de las mujeres suele proyectarse hacia afuera, pero en casos determinados esa proyección es anómala y va hacia adentro. Los pezones invertidos se producen debido a que los conductos de leche dentro de los senos son demasiado cortos y tiran del pezón permanentemente. La inversión del pezón también puede ocurrir como resultado de cambios en las mamas fruto del embarazo o tras la lactancia.

Mediante la cirugía se puede corregir el problema. Algunos métodos quirúrgicos actúan únicamente sobre la piel y permiten preservar la capacidad de amamantar. Si la causa de la inversión se debe a conductos de leche demasiado cortos, será necesario cortar estos conductos, impidiendo la lactancia materna en un futuro. Los pezones invertidos también pueden tratarse con métodos no quirúrgicos para estimular la protrusión del pezón, como puede ser el uso de ventosas. Pese a que estas técnicas pueden ser adecuadas en algunos casos, es aconsejable consultar a un cirujano antes de iniciar cualquier tipo de tratamiento de autoayuda, ya que algunos métodos pueden empeorar el problema o causar daños en los tejidos internos.

Dr. Julio Puig, especialista en cirugía mamaria, es miembro de AECEP y director de Clínica del Dr Julio Puig.

Imágenes: google

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