¿En qué consiste el Mommy Makeover?

El famoso “Mommy Makeover” hace referencia al conjunto de intervenciones estéticas destinadas a paliar los cambios corporales que se producen como consecuencia del embarazo. Y es que la maternidad conlleva cambios físicos y corporales más que evidentes:

  •  La piel del abdomen se estira y se vuelve flácida.
  •  La musculatura abdominal, al igual que la piel, también sufre cambios. Por poner un ejemplo:  los músculos rectos abdominales (los responsables del llamado   six-pack o tableta de chocolate) se separan de la línea media, provocando una protusión abdominal, es decir, una especie de barriguita en la zona central del   abdomen.
  •  Se acumula grasa en la cintura, las cartucheras, las nalgas…
  •  Los senos pierden plenitud y firmeza, pudiendo llegar a descolgarse. Esto se debe a que los pechos sufren variaciones, especialmente en su tamaño y volumen,   para poder producir leche durante el embarazo y la lactancia.

Todo ello provoca que, tras la maternidad, muchas mujeres quieran recuperar su imagen corporal e incluso mejorarla. Además de dietas especiales, ejercicio físico y tratamientos cosméticos existen intervenciones quirúrgicas especialmente destinas a este propósito:

¿Cuáles son las cirugías más comunes para mejorar la figura después del parto?

Los procedimientos que engloba el “Mommy Makeover” son la abdominoplastia, el aumento, la reducción o la elevación de mamas y, en ocasiones, la liposucción de ciertos acúmulos lipídicos.

En la mayoría de los casos es conveniente esperar un año tras el parto para pasar por el quirófano y someterse a esta remodelación estética integral, ya que el cuerpo de la mujer necesita tiempo para adaptarse. Pero en algunas ocasiones se pueden hacer determinados retoques a partir de los tres meses de dar a luz; siempre en función del peso que haya ganado la paciente y de la calidad de su piel.

  • Abdominoplastia

La abdominoplastia permite la eliminación del sobrante de piel y grasa del abdomen a partir de una incisión en la zona inferior del abdomen (perfectamente disimulable al quedar tapada por cualquier tipo de ropa interior o de baño). A partir de esa misma incisión se accede a la musculatura que ha cedido con el objetivo de volver a tensarla consiguiendo, de esta manera, un vientre plano y una cintura más definida.

  • Cirugía de senos

Una vez que cesa el estímulo de la lactancia, la mama comienza a recuperar su aspecto previo al embarazo. Pero en muchas ocasiones la mama cambia ligeramente de forma y posición, se descuelga o se muestra como vacía, es decir, la glándula resbala sobre el músculo y llena más el polo inferior que el polo superior de la mama. Por esta razón la técnica empleada en cada paciente diferirá en función de sus características:

  • Puede que la paciente necesite un aumento de pecho con prótesis mamarias para recuperar el aspecto y el volumen de su pecho.-
  • Otras pacientes precisarán de una reducción mamaria para remodelar y reducir el tamaño de su mama, debido a que los ligamentos y la piel se han distendido.
  • Y también es muy común realizar una elevación de pecho mediante prótesis para remodelar la mama levantándola y devolviéndole su forma y su posición habitual.
  • Liposucción

El tipo de liposucción varía en función de cada paciente y de los posibles cúmulos grasos que haya desarrollado durante el embarazo y/o lactancia (cartucheras, cara interna de los muslos, rodillas…).

La liposucción ataca a la grasa que no desaparece ni con la dieta ni con el ejercicio. Se trata de un procedimiento en el que a través de una pequeña incisión en la zona a tratar se introduce un tubo delgado, llamado cánula, que se encuentra conectado a un aspirador de vacío y que permite succionar la grasa del cuerpo.

Dr. Moltó: especialista en cirugía estética postparto.

COMPARTE